martes, 18 de enero de 2011

EL SEPULTURERO

"Una vez, mientras yo estaba enterrando a uno de mis egos, se acercó a mí el sepulturero, para decirme:
-De todos los que vienen aquí a enterrar a sus egos muertos, sólo tú me eres simpático.
-Me halagas mucho -le repliqué-; pero, ¿por qué te inspiro tanta simpatía?
-Porque todos llegan aquí llorando -me contestó el sepulturero-, y se van llorando; sólo tú llegas riendo, y te marchas riendo, cada vez."

Gibrán Khalil.

1 comentario:

  1. Es extremadamente difícil enterrar un ego, llevamos tantos años viviendo con él que parece que nos arrancaran una parte importante de nosotros mismos, sin embargo, no era nuestro cuando nacimos,se fue formando después...no debería resultar tan difícil.Bueno creo que yo todavía no he conseguido enterrar ninguno, cuando lo haga ya veré si lloro o río, :)

    Besitos

    Un abrazo.

    ResponderEliminar